Comunicado a la Opinión Pública
Acuerdos Municipales en el Suroeste de Antioquia
Territorio COA, Junio del 2017
El Cinturón Occidental Ambiental – COA como proceso de articulación y coordinación de organizaciones sociales, ambientales, indígenas, campesinas, de jóvenes, mujeres y hombres que construimos Territorios sagrado para la Vida en las montañas del Suroeste de Antioquia, saluda y celebra con alegría los recientes acuerdos municipales de Támesis y Jericó, aprobados el 28 de mayo y 7 de junio de 2017 respectivamente, para prohibir la minería metálica en cada uno de estos municipios. El COA reconoce que esta coyuntura obedece a un proceso histórico de organización y reflexión comunitaria frente al actual modelo de desarrollo que amenaza constantemente la vida, el agua y el territorio.
En relación a estos acontecimientos manifestamos:
- El COA celebra el respaldo que los concejos municipales dieron a la voluntad popular, al aprobar los acuerdos municipales. Sin duda, la defensa y construcción de un territorio sagrado para la vida es un esfuerzo de muchos sectores, que confluyen en sentires diversos y acciones conjuntas para que sea la voz y voluntad de las comunidades la que permita garantizar la vida misma y no los intereses corporativos que atestan de beneficios económicos a un porcentaje muy limitado de la población a costa de un futuro incierto para las poblaciones locales. Los Acuerdos Municipales no representan el inicio ni la culminación de un proceso, expresan el rechazo generalizado al modelo extractivo y un horizonte común compartido para construir condiciones de vida digna y de buen vivir en el territorio COA, donde el agua y la vida estén en el centro. Para ello es necesario garantizar la participación, la autonomía, la construcción de planes de vida comunitarios que le den voz a campesinos, indígenas, hombres, mujeres y jóvenes del territorio.
- La amenaza del extractivismo, hace más de una década, dio lugar a la creación de un movimiento ambientalista que ha potenciado diversos procesos pedagógicos, de movilización social y que hoy ya están dando sus frutos: Escuelas de la sustentabilidad, foros abiertos, movilizaciones, Travesías por el suroeste, vigilias por la defensa del Territorio, Consejo de Concejales, Cabildos Abiertos, fortalecimiento de las economías indígenas y campesinas, encuentros de jóvenes, mandatos populares, consultas autónomas, planes de vida comunitarios, etc. Sin duda, a este proceso histórico responden los Acuerdos Municipales.
- Desde el surgimiento del Cinturón Occidental Ambiental COA nos hemos reflexionado las diferentes formas de construir procesos políticos, económicos, culturales y sociales, valorando las formas de participación legítima para incidir en acciones jurídicas en defensa de la Vida. En el año 2012, varios municipios del suroeste de Antioquia le apostaron a la implementación de acuerdos municipales. Támesis, Jardín, Urrao, Caicedo, entre otros, emprendieron acciones jurídicas para blindar el territorio de megaproyectos inconsultos que han generado fuertes conflictos sobre la definición de los usos del suelo, la autonomía de las entidades territoriales y la participación social. Pueblorrico en el 2014 promovió dos acuerdos municipales en los que planteaba una declaratoria de actores no gratos y la prohibición del uso del cianuro y el mercurio en su propia jurisdicción, además de apostarle a la consulta popular. Estas propuestas han sido un ejercicio en el que las organizaciones sociales presentaron mandatos populares y fueron acogidos por el concejo y alcaldía municipal de Pueblorrico, enviando un mensaje al país de que las acciones jurídicas deben ser re-significadas, producto de la participación social y política de las organizaciones que habitan el territorio.
Si bien los acuerdos municipales que se firmaron entre el 2012 y 2014 fueron declarados inconstitucionales, la reflexión de las acciones jurídicas como proceso y producto histórico de la movilización social, nos permitirá avanzar fuertemente hacia la construcción de horizontes políticos que fortalezcan procesos sociales, pues toda acción jurídica debe ser defendida en presente y futuro, y para lograrlo, necesitamos que se alimente de voces y sentidos de vida que emerjan del corazón indígena, campesino, de jóvenes, mujeres y hombres.
Resaltamos que nuestro horizonte no es solamente la prohibición de las actividades extractivas que afectan sustancialmente nuestros territorios, propendemos por la construcción de autonomía y formas de vida sustentables que permitan que nuestros territorios indígenas, campesinos, de hombres, mujeres y jóvenes, sean nuestra construcción colectiva de Territorios Sagrados para la Vida.
TERRITORIO SAGRADO PARA LA VIDA!